Tras culminar en el Hospital Juan Domínguez Romero un recorrido durante todo el día de los hospitales públicos del departamento, el Superintendente de Salud, Fabio Aristizábal dijo que se va "angustiado por lo que vi en el Niño Jesús y tranquilo por lo que veo en el Cari".

La preocupación del Superintendente de Salud con el Hospital Niño Jesús radica en que el 60 por ciento de los pacientes de este centro asistencial "procede de Venezuela".

"Es un detrimento mensual de más o menos mil millones de pesos" señaló Aristizábal. En este caso "hay que tomar decisiones". Explicó el Superintendente que el Hospital Niño Jesús necesita una facturación de 2.500 millones de pesos "para vivir".

El Superintendente anunció que acompañará al Niño Jesús en la contratación porque hay que defender la red pública del departamento.  "Y si tenemos que tomar alguna medida la vamos a tener que tomar".

Con respecto al Cari el Superintendente destacó varios alcances. "Se ve que está en la vía de dignificar a los pacientes", señaló.

Destacó finalmente el respaldo del gobierno en la recuperación de este hospital.

En el Juan Domínguez Romero de Soledad, el Superintendente terminó su recorrido por los hospitales del departamento.